«Por los hijos de nuestros hijos, y por aquellas personas cuyas voces han sido ahogadas por las políticas avariciosas.”
No ha sido una historia nueva la que ha dado el Oscar al mejor director y al mejor actor con “El renacido”, película que desarrolla la misma historia que llevó a la pantalla Richard C. Sarafian en 1971, “El hombre de una tierra salvaje”. En palabras del propio Iñárritu, “La idea es narrar con imágenes y grades silencios una historia mítica mil veces contada. Como al principio de la historia del cine. Considero esta película una pintura sónica”, según comentaba en una entrevista concedida a El Mundo no hace mucho.
Otra aventura rescatada es la reconversión de la saga Mad Max de George Miller , quien dijo durante la presentación de su película en Cannes “Me habría gustado que en toda la película no se dijera ni una palabra. De hecho, el guión se construyó a base de quitar, no de añadir frases”. Esto le ha servido para ganar seis estatuillas por categorías consideradas técnicas, ya que con esta presentación habría sido paradójico que le hubieran dado el Oscar por el mejor guión.
“Nos interesaba la veracidad sin trucos de guión, devolviendo al cine la pulsión de la verdad de un hecho lo suficientemente traumático para no requerir más recurso narrativo que la verdad. La idea es evitar cualquier forma de romanticismo o glamur. El periodismo no es tratado como un ejercicio heroico sino como una actividad con sus propias reglas. Es el compromiso con ellas de los que lo practican lo que lo hace efectivo”. Así definía su trabajo en Venecia Thomas McCarthy antes de conseguir con Spotlight el Óscar a la mejor película y al mejor guión del año.
La gala de los Oscar no es sólo un reconocimiento de los mejores del cine, es una ventana al mundo donde, a parte del lucimiento personal con vestidos unas veces maravillosos y otras veces menos acertados, se puede aprovechar para dar un mensaje o llamada de atención al mundo.
Era 1940, cuando la película ”Lo que el viento se llevó” consiguió 9 estatuillas. Una de ellas fue para una señora que estaba sentada en los bancos reservados para negros, ya que en eso momentos todavía funcionaba la segregación racial en EEUU. La inolvidable Hattie McDaniel tardó tiempo en poder llegar al escenario desde donde estaba sentada , entre lágrimas dio las gracias a los que la había elegido como Mejor actriz de reparto “su corazón estaba muy lleno como para poder decir lo que sentía”. En la gala de 2009, la actriz Mo´Nique, le rindió homenaje vistiendo igual que ella lo hizo en 1940, agradeciéndole haberle abierto el camino.
En la entrega de los Oscar del año pasado hubo varios discursos emotivos, el sincero recordatorio de J.K.Simmons del papel de los padres, el alegato de Graham Mooer contra el suicidio (que deberían ver algunos partidarios de la eutanasia), la dedicatoria de Iñarritu a los mexicanos quien dijo “A los que viven en Méjico, rezo por que podamos construir el gobierno que nos merecemos. Y quienes viven en este país, rezo por que sean tratados con la misma dignidad y respeto que aquellos que vinieron anteriormente y construyeron esta increíble nación de inmigrantes”. Al que se unieron la reivindicación de Patricia Arquette por la igualdad salarial, y las palabras del rapero Common tras recoger el premio a la mejor canción por Glory” del Selma, sobre la vida de Martin Luther King.
Sin embargo la entrega de los Oscar del 2016 , quedará marcada por el discurso de Leonardo DiCaprio, quién consiguió por fin el Oscar al Mejor actor después de seis nominaciones, en su cruzada por hacer que este planeta dure un poco más.
Ya en su cuenta de Twitter se define como “actor y ecologista” y además, desde 1998 preside una fundación que lleva su nombre y “trabaja por la salud y el bienestar de todos los habitantes de la Tierra”.
Parece ser que desde el rodaje de Diamantes de Sangre, su conciencia le hizo ser más reivindicativo en las entregas de premios y ceremonias a las que asistía, consciente de la repercusión de su mensaje. Hace apenas un año, este compromiso le llevó a hablar en la apertura de la Cumbre del Clima de la Naciones Unidas en Nueva York.
«No demos este planeta por sentado«, proclamó DiCaprio, tras recordar que durante el rodaje de El renacido, «tuvimos que viajar al punto más austral del planeta para encontrar nieve”. «Tenemos que trabajar juntos, de manera colectiva, y tenemos que apoyar a los líderes de todo el mundo que no hablan en nombre de los grandes contaminantes y las grandes corporaciones, sino que hablan en nombre de toda la Humanidad», aseguró el actor.»El momento de actuar es ahora. Es imperativo que lo hagamos«, insistió. «Tengo la sensación de que hay un reloj que hace tic-tac, y que es muy urgente que seamos proactivos ante esta amenaza».«La realidad es ésta: si no crees en el cambio climático, no crees en la ciencia moderna o en verdades empíricas, y estarás en el lado equivocado de la Historia. Todos debemos unirnos y votar por líderes a los que les importa el futuro de esta civilización«, concluía.
Anterior a los Oscar fue el discurso que dio en los Globos de Oro :
«Por último, quiero compartir este premio con toda la gente de las naciones originarias de Canadá representadas en esta película, y todas las comunidades indígenas del mundo. Es hora de que reconozcamos vuestra historia y que protejamos vuestras tierras indígenas de intereses corporativos y gente que quiere explotarlas. Es el momento de escucharos y proteger este planeta para las generaciones futuras. Muchas gracias.»
«Hace dos años estábamos sumergidos en la profundidad de la naturaleza, con todas sus complicaciones y toda la belleza cinematográfica que nos da. La película trataba la supervivencia, la adaptación y, sobre todo, la confianza. “
Seis candidaturas, cuatro de ellas a mejor actor protagonista, y muchos otros premios después, Leonardo DiCaprio ha conseguido por fin su Oscar. Y volvió a aprovechar la oportunidad:
«Y por último, sólo quiero decir lo siguiente: Hacer ‘El renacido (The Revenant)’, ha tratado sobre la relación del hombre con la naturaleza. Un mundo en el que todos sentimos cómo 2015 fue el año más caluroso registrado en la historia. Nuestra producción necesitó trasladarse a la punta sur del planeta para poder encontrar nieve. El cambio climático es real, está pasando ahora mismo. Es la amenaza más urgente a la que se enfrenta toda nuestra especie, y necesitamos trabajar unidos y dejar de retrasarlo. Tenemos que apoyar a los líderes de todo el mundo que no hablan por los que más contaminan y las grandes corporaciones, si no por la humanidad, por las comunidades indígenas del mundo, por los miles de millones de personas menos privilegiadas que se verán más afectadas por esto. Por los hijos de nuestros hijos, y por aquellas personas cuyas voces han sido ahogadas por las políticas avariciosas. Gracias a todos por este maravilloso premio, pero no nos olvidemos de este planeta, yo no olvidaré esta noche. Muchas gracias«.
En la rueda de prensa posterior a la ceremonia, DiCaprio fue preguntado por su decisión de dedicar buena parte de su discurso a hablar del calentamiento global, y respondió que «quiso hablar de la mayor crisis existencial que ha vivido nuestra civilización« porque se encontraba sobre una plataforma que le permitía dirigirse a «millones de personas».
En el pasado enero, a su paso por Italia durante la campaña de promoción de la película, pidió ser recibido en el Vaticano por el Papa. Seguramente por sentirse en sintonía con la encíclica Laudato Si, donde el Papa realiza un llamamiento a los políticos para cuidar el planeta. El cambio climático, la contaminación o la superpoblación parece ser que fueron los temas principales de este encuentro en el que hubo intercambio de regalos. DiCaprio regaló al Papa un libro de reproducciones de obras del pintor del siglo XV Jheronimus Bosch (El Bosco), y le explicó así mismo cómo veía reflejado en sus pinturas los actuales problemas del mundo, el Pontífice ofreció al actor una copia de Laudato Si, con portada de cuero.
Recientemente, el actor ha recibido el Crystal Award por su fuerte compromiso a favor del medio ambiente, una lucha en común entre el actor y el Pontífice.
Hacen falta voces decidas y claras para cambiar las cosas, pero hay muchas conciencias que tocar.
Fuentes: Fotograma, El Mundo, El Confidencial.
Fotos: www.oscar