fbpx
No Result
View All Result
Newsletter
Woman Essentia
  • Inicio
  • Punto de Vista
    • Woman Essentia
    • Opinamos
    • Actualidad
    • Encuestas
  • Personas
    • Protagonistas
    • Familia y Educación
    • Hicieron Historia
    • Jóvenes
    • Trabajando en Primera Persona
  • En Armonía
    • En armonía
    • Cocina
    • Deportes
    • Salud y Belleza
    • Moda
    • Viajar
  • Del presente al futuro
    • Ética
    • Mundo económico
    • Aprendemos
    • Transformación Digital
    • Tecnología
  • Arte y Cultura
    • Arte
    • Cine y Series
    • Libros
    • Relatos y Cuentos
    • Excelencia Literaria
    • Escuchando
    • Un poco de Historia
  • Un mundo mejor
  • Inicio
  • Punto de Vista
    • Woman Essentia
    • Opinamos
    • Actualidad
    • Encuestas
  • Personas
    • Protagonistas
    • Familia y Educación
    • Hicieron Historia
    • Jóvenes
    • Trabajando en Primera Persona
  • En Armonía
    • En armonía
    • Cocina
    • Deportes
    • Salud y Belleza
    • Moda
    • Viajar
  • Del presente al futuro
    • Ética
    • Mundo económico
    • Aprendemos
    • Transformación Digital
    • Tecnología
  • Arte y Cultura
    • Arte
    • Cine y Series
    • Libros
    • Relatos y Cuentos
    • Excelencia Literaria
    • Escuchando
    • Un poco de Historia
  • Un mundo mejor
No Result
View All Result
Woman Essentia

El Golden Maialy

David Fournier por David Fournier
5 junio, 2022
en Relatos y Cuentos
0
0
Home Arte y Cultura Relatos y Cuentos
Compártelo en FacebookTuitéaloPublica en Google Comparte en LinkedInCompartir en PinterestCompartir por WhatsappEnviar por mail

– Qué es esto? -dijo con gran estruendo el chico.

– Es tu regalo de cumpleaños -sentencié con seguridad.

El rostro del chico manifestaba una mezcla entre desagrado, decepción y engaño. Por lo que no era ausente a su desasosiego. Así que traté de mantener la calma no con cierta sorna.

– Abuelo, no sé por qué sonríes -manifestó mostrando su desencanto, mientras fruncía el ceño.

– Tranquilo -intenté mantener la compostura-, pero me causa cierto asombro la forma que has despreciado mi regalo.

Mientras, el animalito caminaba con cierta avidez a pesar de sus cortas patas, investigando el terreno olisqueando con su achatada naricita. La colita retorcida como un chorizo, enroscándose sobre sí misma, las orejas caídas y un leve sonido “oink, oink”. Todo ello, agravaba más aún, si cabía el enfado de mi nieto.

– Abuelo, yo esperaba un Golden Retiever -me explicó enojado-. Y mira lo que me has traído.

– Está bien -me acomodé a su lado-, te voy a explicar una historia.

El chico se calmó un poco, le pasé el brazo para acogerle y comenzar mi relato:

– Hace muchos años, cuando aún no habías nacido, había una jovencita, preciosa que se encontraba a la espera de su primer hijo. Se había convertido en todo un acontecimiento en la familia. No sólo su marido estaba entusiasmado por la buena nueva que se avecinaba, si no que sus padres, hermanos, amigos y allegados celebraban con alegría la nueva vida que se habría paso en este mundo. El embarazo transcurrió en un ir y venir de algarabías alegres, donde corría el vino, buenos manjares que ofrecía la tierra y presentes que le brindaban a la futura madre.

– Abuelo, espero que esto no sea un rollo -dijo mi nieto con cierto descaro.

– Tranquilo, ten un poco de paciencia –acerté a decir mientras le daba unas leves palmaditas sobre su pequeño hombro-. Como decía, la joven transcurría sus días en un constante acontecimiento social en el pueblo, denotando los mejores sentimientos de los pueblerinos.

Hice una pausa para comprobar la atención de mi nieto, y proporcionarle un poco de intriga.

– De repente, como ocurren todas las cosas buenas y malas de este mundo, llegó el tan esperado día. La jovencita, inevitablemente se puso de parto. Ella, que venía de buena familia y lustrosa casta, tuvo un alumbramiento digno de las señoras pudientes del pueblo con una elegancia que jamás ninguna comadrona había vivido con anterioridad -dije mientras me quedé un poco pensativo recordando el momento.

– Abuelo, ¿y qué pasó? -insistió mi nieto con premura, mientras le miré con complicidad.El médico de la familia recogió entre sus brazos al nuevo miembro sin ser capaz de disimular un cierto asombro. La joven, empapada en sudor, a pesar de su casta, después del esfuerzo, se percató del semblando pálido del doctor. Tan pálido como si le hubieran encalado en ese mismo instante. Lo cual preguntó: “¿qué pasa doctor?”. El recién nacido presentaba un aspecto un poco peculiar: nariz excesivamente achatada, tanto que los orificios se disponían como los cañones de una naviera, extremidades cortas y rechonchas, un tronco embutido en grasa recubierto por una piel sonrojada.

– Vaya, que niño más feo -dijo con cierto desprecio mi nieto.

– No te quito razón. Cuentan las malas lenguas, que en lugar de llorar emitió un sonido parecido a un “oink, oink” -dije mientras miraba de reojo a mi nieto esperando su reacción.

– Abuelo, ¿era un cerdo?

– No, no exactamente. El recién nacido generó un gran revuelo en pueblo, entre otras cosas porque esperaban un progenitor a la altura de las circunstancias de la dama que le había engendrado. Lo cual, provocó una gran desilusión en la familia, hasta al punto que ciertos miembros, amigos y familiares proyectaron una actitud repulsiva y de desprecio. La Señora se sintió perdida y desolada desde entonces. De alguna manera se sentía culpable por tal atropello a la belleza natural que se esperaba con tanta ilusión.

– Que gente más mala, abuelo -dijo mi nieto asombrado.

– Bueno, el ser humano a veces es un poco cruel -le contesté con suavidad-. Pasaron los años y la madre tuvo que hacer frente prácticamente en solitario en los quehaceres de la educación del extraño niño. Aunque hay que decir, que su marido trabajaba muy duro para salir adelante, te lo aseguro -miré a mi nieto-. El niño, no dejaba de sorprender porque, aunque tenía un aspecto, digamos diferente, y porque no, repugnante, gozaba de una extraordinaria inteligencia, amabilidad, paciencia y sobre todo bondad. Aunque cuando comenzó a gatear la imagen se transformó en aún más penosa, resulta relevante que la ya no tan joven pareja vio en él un potencial suficiente para que se sacrificaran en su educación y sobre todo, en su felicidad. Lo importante para ellos es hacer del retoño una persona de bien, con el suficiente carácter para hacerse autónomo y seguro de sí mismo y así afrontar los avatares que se le iba a presentar a lo largo de su vida. Y así fue, como un día, de repente como ocurren tanto las cosas…

– Y las malas de la vida, ya lo has dicho abuelo.

– Así es. Pues de repente, conoció a una joven que fue capaz de ver en él, esa inteligencia, amabilidad y sobre todo bondad dejando el aspecto incómodo que tenía el chico. Había que ahondar con cierto ahínco para adentrarse en su persona y encontrar esas características que le hacían de él un ser tan especial.

– Oh, vaya -me miró asombrado- ¿y qué era esa mujer?

– Estaba esperando esta pregunta -me volví hacia mi nieto-. Esa mujer era tu madre. Ella fue capaz de encontrar y apreciar el interior de ese chico tan extraño que los más cercanos se alejaron para repudiarlos a los tres. A veces, hijo mío, la familia puede llegar a ser tu peor enemigo.

– Entonces -dijo expectante- ¿el cerdo era mi padre?

– Así es, pero no era exactamente un cerdo -dije asintiendo.

Esperé unos instantes la reacción de mi nieto.

– Lo importante es, mirar dentro de cada uno de nosotros y de los demás para ver lo que realmente merece la pena -le dije mientras le arrechuchaba-. El aspecto es una superficie secundaria, como una coraza para guardar los más preciado que está en nuestro interior.

– Sabes abuelo, creo que ya me está gustando más mi regalo, además ya le tengo un nombre.

– Eso me gusta, cuál es el nombre.

– Le voy a llamar Golden Maialy.

Propiné una sonora carcajada junto con mi nieto.

¿Te gustaría recibir notificaciones sobre este artículo de nuestra revista?

Eliminar suscripción
Artículo anterior

Pentecostés: ¡Déjate llevar por el Espíritu!

Artículo siguiente

¿Qué papel juega el cerebro en el aprendizaje en el ser humano?

David Fournier

David Fournier

David Fournier "Físico teórico" y empresario Consultor de Seguridad

Relacionados Entradas

abuelo
Relatos y Cuentos

Lo que hay que hacer

Era un atardecer gélido, frío, tenebroso por la oscuridad lapidaria. Los caminos embarrados, tortuosos, deformados por el paso de la...

por David Fournier
11 junio, 2022
44
El político transexual
Relatos y Cuentos

El político transexual

Siempre fue un hombre muy viril, por lo que nadie que le conociera hubiera creído a donde le iba a...

por Joaquín Diaz
13 mayo, 2021
185
Hay cole. Fundación montpellier
Relatos y Cuentos

¿Hay cole?

- ¿Hoy hay cole? - pregunto cada día. Y si la respuesta es sí, doy un salto de la cama....

por Vanesa García Pérez
15 abril, 2021
129
Artículo siguiente

¿Qué papel juega el cerebro en el aprendizaje en el ser humano?

¿Qué te pareció este artículo? Deja tu opinión:

Suscríbete a nuestra Newsletter

Facebook Twitter LinkedIn Pinterest Instagram YouTube RSS

Woman Essentia

  • Quiénes somos
  • Contacto
  • Colabora con nosotros
  • Publicidad
  • Politica de Privacidad
  • Política de Cookies

Blogs Essentia

  • Tu look habla
  • El blog de Miguel Aranguren
  • Mis ideas cotidianas
  • Empezando desde SEO
  • El blog de Lourdes Ojeda

¿Sobre qué quieres leer?

  • Actualidad
  • Aprendemos
  • Arte
  • Arte y Cultura
  • Cine y Series
  • Cocina
  • Deportes
  • En Armonía
  • Encuestas
  • Ética
  • Excelencia Literaria
  • Familia y Educación
  • Hicieron Historia
  • Jóvenes
  • Libros
  • Moda
  • Mundo económico
  • Naturaleza, Ciencia y Tecnología
  • Opinamos
  • Personas
  • Protagonistas
  • Punto de vista
  • Relatos y Cuentos
  • Salud y Belleza
  • Trabajando en Primera Persona
  • Transformación Digital
  • Un mundo mejor
  • Un poco de Historia
  • Viajar
  • Woman Essentia

Contenidos

  • Personas
  • Del presente al futuro
  • Arte y Cultura
  • Salud y Belleza
  • Solidarias

Newsletter

© 2019 WomanEssentia

No Result
View All Result
  • Portada
  • Personas
  • Salud y Belleza
  • Del presente al futuro
  • Arte y Cultura
  • Solidarias
  • Blogs Essentia
  • Punto de vista

© 2019 WomanEssentia

Welcome Back!

Sign In with Facebook
OR

Login to your account below

¿Has olvidado la contraseña?

Create New Account!

Fill the forms below to register

*Al registrarte en nuestro sitio web, entendemos que has leído y aceptado nuestraPolítica de privacidad.
All fields are required. Log In

Retrieve your password

Please enter your username or email address to reset your password.

Log In
Suscribete

Ediciones Essentia SL gestiona esta página web y utiliza cookies y tecnologías similares (en adelante "Cookies"). Algunas Cookies son necesarias para hacer accesible esta página. Otras Cookies nos permiten analizar y medir las audiencias y el tráfico de la página web. Las Cookies también son utilizadas para mostrar publicidad que es más relevante para sus intereses ("Cookies Publicitarias basadas en intereses"), tanto por nosotros como por anunciantes y otros socios. Puede pulsar en el enlace "Panel de Cookies" más abajo para revisar el tipo de Cookies que usamos tanto nosotros como terceros que pueden instalar Cookies publicitarias basadas en intereses en esta página. Puede ajustar sus preferencias de Cookies en cualquier momento utilizando el Panel de Cookies. Para continuar en la página web sin Cookies Publicitarias basadas en intereses, pulse en el botón "X" en la esquina superior de este mensaje. Para aceptar el uso de Cookies Publicitarias basadas en intereses en esta página web pulse "Acepto" más abajo. Política de Cookies.