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Los increíbles 2 aborda entre broma y hazañas de superhéroes algunas cuestiones de gran actualidad, desde la importancia de la comunicación y la reputación de las personas, empresas o profesiones, hasta el papel de la mujer en el mundo profesional y su capacidad de liderar espacios antes destinados a los hombres. Sin olvidar, claro, el gran tema de Los increíbles, su visión de la familia como núcleo fundamental de la sociedad.
Más de un crítico tuerce el gesto al hablar del cine familiar, sin reparar que –especialmente en estas fechas veraniegas- es un género que suele venir acompañado de alegrías en la taquilla. Ahí está El mejor verano de mi vida, una cinta que –a pesar de su modestia- ha conseguido unos estupendos resultados.
Consciente de ello, la todopoderosa Pixar suele guardar algún estreno de animación para cuando aprieta el calor. Pixar no puntúa por debajo del notable y suele superar con creces esta calificación. Estamos por lo tanto hablando de un cine familiar que no solo gusta al público y llena las taquillas sino que convence a los críticos.
El próximo viernes se estrena la segunda parte de Los increíbles ; uno de los títulos más redondos de la franquicia. Hace 14 años, Brad Bird sorprendió con un relato divertido, agudo y –vista la complejidad que ha adquirido el género de los superhéroes- visionario. Contaba la película las desventuras de una familia de superhéroes que tiene que esconder sus poderes y ocultarse. En esta segunda entrega, Helen, la madre de familia, para mejorar la reputación de los superhéroes tendrá que ponerse a trabajar mientras Bob, el padre, cuida a los niños.
Como casi todo el cine de Pixar, la cinta tiene un magnífico guión que combina la acción más frenética con la descripción de la vida cotidiana de la familia llena de sabrosas anécdotas y divertidos sucesos. El desarrollo de cada personaje, empezando por Elasti girl y terminando por el bebé, se ha mimado al detalle dejando además la puerta abierta a nuevos episodios centrados en un solo personaje.
El envoltorio visual, como siempre, es maravilloso, al igual que la banda sonora. Y eso que venimos de Coco, que en este apartado superaba el difícil récord que Pixar se marca en cada una de sus nuevas producciones.
Para rematar la faena, y como pasaba en la primera parte, Los increíbles 2 aborda entre broma y hazañas de superhéroes algunas cuestiones de gran actualidad. Desde la importancia de la comunicación y la reputación de las personas, empresas o profesiones, hasta el papel de la mujer en el mundo profesional y su capacidad de liderar espacios antes destinados a los hombres. Sin olvidar, claro, el gran tema de Los increíbles 2, su visión de la familia como núcleo fundamental de la sociedad, como el ámbito donde las personas son queridas como son –con o sin superpoderes- y donde pueden desarrollar sus habilidades y crecer como personas, a pesar de las dificultades; porque sacar adelante una familia tiene bastante de heroísmo.
Y, todo esto, sin moralinas, sin mensajes, ni pancartas. A golpe de historias, que es como hace las cosas Pixar.
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